1

Guayacán, un espectáculo de la estación seca

Durante los últimos días, a orillas de las calles, avenidas, potreros y patios, la floración del guayacán (Tabebuia guayacan) contrasta con las diversas tonalidades de verde y el firmamento celeste, hasta convertirse en atracción visual para propios y extraños.

En las redes sociales, esta belleza natural ha sido compartida mediante fotografías y videos por quienes quedan enamorados de su belleza y se reportan principalmente en los distritos de Alanje, Bugaba, David, Dolega, Boquerón y Barú.

Datos del vivero de la Sección Forestal del Ministerio de Ambiente (MiAMBIENTE), se distribuyó el año pasado más de 3 mil plantones de esa especie; siendo esta una de las especies más solicitadas en las ferias interinstitucionales.

“Detenerse para capturar una fotografía o video y contemplar la belleza del árbol en especial su floración nos demuestra las bondades que tiene para con nosotros la madre tierra, debemos cuidarlos, no solo a ellos sino al resto de la cobertura boscosa”, dijo Clementina Álvarez, residente en Sortová.

Según la literatura, el nombre científico del género “Tabebuia” proviene de la palabra taiaveruia, que significa madera de hormiga, quizás por la presencia de hormigas en las ramitas huecas. El nombre específico “guayacán” proviene del vocablo taíno waiacan, del grupo indígena que habitaba las islas del Caribe en tiempos de la conquista.

Y es que esta especie caducifolia, de estatura mediana entre loa 20 y 40 metros. Son nativos de la América tropical, los hay desde México hasta Colombia y Venezuela, creciendo en bajas y medianas elevaciones. Esta especie prefiere climas húmedos y calientes, con suelos de buen drenaje.

Curiosamente ellos pierden todas sus hojas y luego se llenan de flores. Su florecimiento marca el inicio de la temporada lluviosa, cuando los días se tornan calurosos y los cielos se llenan de nubes, las condiciones son ideales para que broten las vistosas flores de los guayacanes.

Lastimosamente, este espectáculo solo dura entre tres y cinco días. Luego verás una alfombra de flores amarillas en el piso. Las flores de los guayacanes dependen de aves o abejas para su polinización.

La producción de esta especie y de otras 37 más forman parte del compromiso para con el Programa Nacional de Restauración Forestal (PNRF) que tiene como meta lograr reforestar en estos cinco años más de 50 mil hectáreas con una visión clara en los temas de protección, conservación de cuencas prioritarias y productoras de agua a nivel nacional, junto a socios y aliados estratégicos.

Una de las familias de especies que más fueron observadas fue la especie Ardeidae y de las aves que más se observaron fueron la garza azul chica como indicador ecológico.